lunes, 1 de noviembre de 2010

¿HALLOWEEN O TODOS LOS SANTOS? II


Lo prometido es deuda. Ya hemos "hablado" de halloween y hoy toca "hablar" del día de Todos los Santos.

El domingo por la tarde mi madre y yo nos metimos en la cocina e hicimos buñuelos para toda la familia, en especial para mi padre, que le encantan.

Mi madre los hace todos los años y yo el año pasado me lancé pero no me salieron bien. Yo no tengo ninguna máquina de amasar y la verdad que sin ella, la masa es muy difícil de trabajar, pesada y no liga a menos que tengas mucha paciencia y la trabajes bien. En muchas ocasiones paciencia es lo que me falta y me di por vencida antes de que la masa estuviera bien ligada.

Pero mi madre, que es una gran cocinera y sobre todo, repostera, no hay nada que se le resista, y más si es un postre tradicional.

Aquí os dejo con su receta, en esta ocasión yo solo fuy pinche.


Ingredientes:
  • 1 vaso de agua
  • 1 vaso de harina
  • Unos granos de sal
  • 3 huevos
  • Aceite de girasol
  • Crema pastelera
  • Chocolate de Vezdemarbán
  • Azucar glass
En primer lugar hay que escaldar la harina. Para ello ponemos el vaso de agua a hervir, añadiendole unos granos de sal. Cuando hierva bien hechamos el vaso de harina y empezamos a remover, ya fuera del fuego, hasta tener una masa consistente. Esta es la masa de los churros, por si alguna vez os apetecen.

Añadimos uno a uno los huevos y mezclaremos bien. No añadiremos otro huevo hasta que no esté integrado el anterior. Si teneis amasadora os facilitará mucho el trabajo, si no vuelta tras vuelta hasta que integremos todos los ingredientes.

Dejamos reposar una media hora la masa. Transcurrido este tiempo, ponemos el aceite en una sartén a fuego fuerte, cuando esté bien caliente, vamos distribuyendo bolas de masa. Si tenemos una manga lo haremos con ella, si no con una cucharilla pequeña. El truco está en ir dando vueltas a los buñuelos, hasta que se hinchen y se hagan bien por dentro, sin que nos quemen por fuera.

Ponemos a escurrir en un papel de cocina y una vez frios, abrimos los buñuelos, con una tijera y rellenamos. El relleno tradicional es a base de crema pastelera pero yo no me resistí a rellenar algunos con chocolate de mi pueblo, del que ya os hablaré.

Emplatamos y espolvoreamos con azucar glass.



Un postre laborioso pero riquisimo.

Ah! Se me olvidaba. En mi pueblo es tradición de este día comer los típicos "Picos". No son ni más ni menos que una masa de pan anisada. Antiguamente, la gente iba camino del cementerio comiendo esté pan.





6 comentarios:

  1. Se ven deliciosos, felicidades para la cocinera y para la pinche.
    besos

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  2. el domingo por la noche me cansé de ver a gente disfrazada y celebrando hallowen, igual dentro de unos años nos vemos celebrando el día de acción de gracias ja ja ja.
    Los buñuelos riquísimos, eso sí que no nos los cambian.
    un besito

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  3. Tienes razón Clemenvilla (por cierto, sigo tu blog desde hace tiempo y me ha echo mucha ilusión tu comentario). Ultimamente nos fijamos más en las fiestas "agenas" y olvidamos las propias, aunque tratantdose de fiesta ¿por qué no las dos?

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  4. Gracias por estas recetas tradicionales, Vicki. Cocinar tiene algo de magia y de viaje en el tiempo y en el espacio. Por eso nos debe gustar cocinar lo que cocinan nuestras madres y nuestras abuelas, pero también hacer galletas de genjibre o cosas que no tienen que ver con nuestra tradición, sobre todo si con lo que cocinamos disfrutan las personas que queremos. Besitos.

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  5. Para mi, uno de los mejores recuerdos que tengo de la infancia es cuando mi madre y yo nos metiamos los sábados en la cocina y preparabamos el postre del domingo. Ahora seguimos haciendolo y cada vez que voy a casa, la cocina es nuestro "santuario" donde mi madre y yo cocinamos, compartimos y charlamos.

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