No queria perder la oportunidad de enseñaros el postre improvisado que preparé para San Valentí. Son unas bizcobolas de red velvet con chocolate negro, decoradas, como el día exigia, con diferentes corazones, entre ellos, unas minigalletas que me envió mi
Beuty Valentine´s, Davinia de
cupcakelosophy.
Nunca habia preparado bizcobolas pero en esta ocasión creo que no me quedaba más remedio porque ¡soy un desastre! Hace unos cuantos día prepararé unos bizcochos individuales preciosos, en forma de corazón. La idea era presentarlos como un red velvet, cubierto con su frosting de queso pero... un día no me dio tiempo a prepararlo, otro a nadie le apetecía y los pobres se fueron quedando en el fondo de un cajón, olvidados hasta que el otro día me acordé pero, claro, eso ya estaba incomible. Me acordé de ese "invento" que he visto en muchos de vuestros blogs y pensé: "voy a probar". El resultado fue buenísimo. Nos encantó, a algunos incluso más que la propia tarta.
En mi caso utilicé bizcocho red velvet pero se puede hacer con cualquier bizcocho, al igual que la "pasta" que también admite diferentes variantes y la cobertura.
Os cuento como las hice yo:
Ingredientes (para unas 45 bizcobolas):
500 gr de bizcocho red velvet
250 gr de queso tipo philadelpia (en mi caso de la marca Mercadona)
1 chorrito de leche condensada
2 tabletas de chocolate negro fondant (de mercadona)
1 cucharada de postre de manteca
Sprinkels para decorar
En primer lugar tenemos que triturar el bizcocho. Si tenemos algún tipo de máquina, thermomix o trituradora nos ayudaremos con ella, si no lo podemos desmenuzar a mano, asegurandonos de que no quede ningún trozo demasiado grande.
Despues añadiremos el chorrito de leche condensada y poco a poco, el queso crema, mezclando con las manos hasta conseguir una masa que quede un poco dura y no demasiado pegajosa, si fuera así, las bizcobolas quedarían demasiado blandas y se romperian. Metemos la mezcla un ratillo en la nevera (unos 10 minutos) para que se endurezca un poco.
Mientras se enfría derretimos el chocolate al baño maría. Si no os gusta tan negro podeis mezclar el chocolate fondant negro con una tableta de chocolate con leche, tipo Nestle. Añadimos la manteca para que el chocolate quede más brillante.
A contiación hacemos bolas con las manos, no demasiado grandes (quedarian más empalagosas).
Con ayuda de una brocheta introducimos la bizcobola en el chocolate, cubriendola completamente.
En algunas ocasiones las bizcobolas se presentan insertadas en un palo, a modo de piruleta, en mi caso las dejé enfriar un unas mini-cápsulas de silicona que me hizo llegar Carmen, del Pucherete de Mari y que me vinieron estupendamente.
Por último, y antes de que se seque el chocolate añadimos los sprinkels y metemos en la nevera.
Resultado: deliciosas, crujientes por fuera y tiernas por dentro... ummm ya estoy pensando en repetirlas!
Esta es mi aportación a HECM, que, en esta ocasión Manuel de Cocinando con ManuCat nos propone para celebrar San Valentín.